primero de mayo, nada que festejar

hoy los trabajadores y trabajadoras tenemos poco, muy poco que festejar.

hoy, cuando asistimos a toda esta política de recortes y liquidación de una serie de derechos que nos hacían la vida un poco más digna, sólo un poco;

hoy, cuando el estado de perplejidad en el que parecemos instalados todos nos tienen amordazos de boca, piernas, manos e imaginación, sobre todo de imaginación;

hoy, cuando nos rebajan sueldos con el espantajo de que puedes perder tu puesto de trabajo, convertido en el gran fetiche, a pesar de comprobar que cada vez te ganas menos la vida, pero eso sí, la tasa de ganancia empresarial continúa inalterable.

hoy, cuando desde el poder se pone en práctica un proyecto de "chinificación" de la economía y de la sociedad, es decir, ante la imposibilidad de salvar la economía capitalista con las recetas y recursos acostumbrados se vuelven las miradas del mundo capitalista hacia "el milagro chino" con el razonamiento de "si ellos pueden con esas tasas de explotación y recortes de derechos, porque nosostros no".

hoy, cuando los trabajadores comprueban su soledad ante la traición de la burocracia sindical de CCOO y UGT, que se llenan de verborrea cuyo tufo a falso los deja en ridículo y con el culo al aire.

hoy, cuando la lucha de clases es cada vez más feroz porque la burguesía lleva más de un siglo de victorias sobre nosotros y quiere perdurar en ello porque ahí y sólo ahí residen las bases de su poder.

hoy cuando aún continúan en la cárcel el Isma, el Dani y el Javier acusados sin pruebas fehacientes de provocar nadie sabe qué el día de la última huelga general y cuando a la compañera Laura Gómez, Secretaria de Organización de CGT se la acusa, sin pruebas, de haber participado en el incendio de una hoguera delante de la Bolsa de Barcelona (todo ello me resulta conocido, muy conocido, porque pienso en mi amigo Rodri y en mi amiga Patricia Heras), eso siempre se ha llamado elegir "cabezas de turco", por supuesto, Félix Millet, el "yernísimo" y todos los elefantes que se balancean continúan campando en libertad.

hoy los trabajadores no tenemos nada que celebrar

hoy no podemos menos que agradecer el espíritu de lucha de los estudiantes como lo demostraron en la extraordinaria huelga del 19 de febrero y, por supuesto, agradecer el ejemplo de mis amados "iaiosflautas" (en catalá:iaia o iaio es abuela o abuelo) que demuestran una valentía admirable en sus acciones -la última ocuparle a Felip "Don Limpio" Puig el vestíbulo central de la Consellería d'Interior- y una claridad ideológica y política que para si quisiera más de uno.

hoy que no tengo nada que festejar sólo sentirme orgulloso de ser marxista y viejotopo


(aquí queda este vídeo con la balada de Sacco y Vanzetti que un día cantara Joan Baez, que nunca ha sido santo de midevoción, pero que aquí tiene el acierto de ponerle música a una de las cartas que Vanzetti le remitiera a su padre desde la prisión)



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